sábado, 14 de octubre de 2017

ARTCHICÓ 3


En el año 2017  Artchico llega a su tercera edición  y la organización de la feria aprovechando  lo fortalecida que salió tanto en imagen y calidad  en su edición pasada,  decidieron  replantear  la feria.  Sé que la feria es joven,  pero lo que se percibe desde el seno de la organización de la feria es que lo se quiere es crecer, mejorar  y perdurar: “sabemos  que hay cosas que mejorar a futuro” afirmó uno de los organizadores el año anterior y de aquí los cambios en el formato de la feria.

Artchico en su nueva edición comienza una nueva etapa  como feria de galerías de arte contemporáneo centrándose en el arte iberoamericano español y portugués.
La feria  Artchico en este año 2017 contará con la dirección del español  Gregorio Cámara Castellanos que  posee una licenciatura en dirección y administración de empresas de la universidad Carlos III de Madrid y un máster en arte contemporáneo del instituto Sotheby's de Nueva York.

La feria este año cuenta con la  curadoria  de  Ramiro Camelo quien realizó estudios de sociología y profundización en historia y teoría del arte en la Universidad Nacional de Colombia de Bogotá; también recibió un "master of arts” en curaduría de arte contemporáneo del Royal College ofAart de Londres. 

El modelo de participación de este año en la feria fue  por invitación. Dentro de los cambios también tenemos la fecha y lugar. La feria se realizara del 26 al 29 de octubre en el centro de eventos auditorio calle 81, que se ubica en la calle 81 #12-95, junto al centro comercial Atlantis Plaza, frente al centro comercial Retiro. Con la participación de galerías en las que se encuentran:

Atm (Gijón), Combustión Espontánea (Madrid), Casa Cuadrada (Bogotá), Dot51 (Miami), Espacio 101 (Bogotá), Fundación Art For Heart (Bogotá), Gema Llamazares (Gijón), Klaus Steinmetz Contemporary Art (San Rafael De Escazú), La Balsa Arte (Bogotá), La Projects (Madrid), Motp (Mar Del Plata), Rincón Projects (Bogotá), South Wind Projects (Valladolid, Mx), La Rueda (Quito), Xespacio De Arte (Ciudad De México).


Dentro del marco de la feria Artchico se desarrollará Artbasefoto 2017. La programación de 

la feria se complementará con conversatorios y diferentes presentaciones.

  • El viernes 27 de octubre a las 5 pm estará  la  Conferencia la revolución de lo ancestral, organizada por la galería South Wind Projects, Ese mismo día, a las 7 pm se hará la presentación de la publicación Colombia Arte Actual por la editorial chilena Arte al Límite, con un panel compuesto por la crítica Jimena Peña y los artistas Maquiamelo Y Maria Eugenia Trujillo.
  • El sábado 28 de octubre, a la 1 pm presentamos el proyecto Transracialismo del artista madrileño Che Marchesi. 
  • Tambien está previsto articular un programa de actividades para coleccionistas con visitas a colecciones privadas e instituciones; la más destacada será la magnífica colección de Lilly Scarpetta.



jueves, 12 de octubre de 2017

MES DEL ARTE EN BOGOTÁ

Antonio Caro , artbo 2016  / Foto archivo Tito Aill,on Tovar
Octubre es el mes donde la ciudad de Bogotá respira arte. Artbo, Artchico, Barcu, Odeon Y La Feria del Millón son las encargadas de que coleccionistas, curadores, espectadores, compradores  y amantes del arte  se agrupen en este mes para ver las propuesta de artistas de diferentes nacionalidades en Bogotá gracias a la simultaneidad de las ferias.

Cada feria pose su programación alterna  con la que buscan un acercamiento  al arte con el público conocedor y general. Abajo encontrarán las ferias con que la ciudad de Bogotá  le abre sus puertas al arte en 2017 .

ARTBO: se llevará a cabo del 26 al 29 de octubre en el recinto ferial de Corferias: avenida la esperanza con carrera 39, Bogotá; mayor información en www.artbo.co.

ARTCHICO: se llevará a cabo desde el 26 hasta el 29 de octubre en  el centro de eventos auditorio calle 81, que se ubica en la calle 81 #12-95; mayor información en www.artchico.com/

BARCÚ: Iniciará el 24 e irá hasta el 30 de octubre, en el  centro histórico la Candelaria; mayor  información en www. barcu.com.

LA FERIA DEL MILLÓN: Será desde el 28 hasta el  30  de octubre; mayor información: www.feriadelmillon.com.co.



ODEÓN: Comenzará el 27 y se extenderá hasta el 30 de octubre en el espacio Odeón – Centro Cultural; mayor información en  www.espacioodeon.com.

Desde hoy les invito a programarse para recibir al arte en nuestra ciudad.

SELECCIONADOS PARA ARTBASE FOTO 2017

En la primera convocatoria se recibieron 171 obras de 94 artistas.
El jurado seleccionó  18  artistas  que estarán exhibiendo en esta primera versión de Artbase Foto en el marco de ArtChico 3:

  1. Paulo Álvarez
  2. Mario Orbes
  3. July Andrea Fandiño
  4. Sofía Botero
  5. Leo Carreño
  6. Gustavo Tomas Moreno Yaco
  7. Diego Tobón
  8. Paul Weiss
  9. Simón Susacon
  10. Veronica Giraldo
  11. Juan Sebastián Rojas
  12. Zoad Humar
  13. Angie Rangel
  14. Coco Miranda
  15. Leidy Viviana Mayoral
  16. Diego Torre
  17. Oswaldo Gonzalez Valdivieso
  18. Milena Arango


domingo, 8 de octubre de 2017

CREEN QUE LA FOTOGRAFÍA ES ARTE SI ESTÁ EN GRAN FORMATO: DUANE MICHALS

 Duane Michals en la entrada de la exposición en Barcelona 

POR MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ EN MADRID 
ENTREVISTA.

“Los jóvenes no tienen idea del arte ni de su filosofía, lo que quieren saber es qué tienen que hacer para ser famosos. Pero, para mí, hay que saber explicar qué quieres decir con tu trabajo, y si la necesidad que tienes es grande, entonces encontrarás el modo de expresarte a través de una fotografía”
La figura de Duane Michals es fundamental para entender el fenómeno de la fotografía en la segunda mitad del siglo XX. A partir de los años sesenta se hace famoso por sus fotografías de artistas ( Tennessee Williams y Andy Warhol, entre muchos otros), y en especial sus fotomontajes que hace sobre Magritte se convierten en símbolos de un discurso estético que tiene que ver con otros elementos de la foto. Desde 1974 realiza fotografías que incluyen textos.

Su reciente exposición Duane Michals. Retrospectiva cerró el pasado 10 de septiembre y estuvo en la Fundación Mafre de Barcelona, y es un recorrido expositivo que muestra las diferentes modalidades expresivas inventadas paulatinamente por el fotógrafo, así como las diferentes series realizadas sobre temas concretos a lo largo del tiempo.
— Usted es uno de los artistas que asimiló  progresivamente las técnicas de la fotografía, “infectando” a su vez  ésta con el germen de su propia estética, ¿cómo romper con la foto tradicional?
— En los años sesenta decido dedicarme de lleno a la fotografía. En aquellos tiempos era un “arte conservador”, se podía  ser Cartier-Bresson o Ansel Adams; es decir, teníamos  muy limitadas posibilidades. La fotografía esperaba todavía el reconocimiento, necesitaba ser considerada arte. Desafortunadamente, perdía su virginidad del peor modo posible: intentando imitar la pintura y retomando de ella, de hecho, los peores vicios  posibles. Por ejemplo, para que una fotografía sea reconocida como arte, ya no tenemos que  preocuparnos por su estética, sino por sus dimensiones. Ahora importa el formato.

Sting Looking Like a Young Danny Kaye, 1982; 
            Gelatin silver print  Duane Michals Courtesy of the Artist and
              DC Moore Gallery

— Hay otros fotógrafos que, como usted, han hecho de la foto un arte. Ahí están Milton H. Greene, Lisette Model, Gottfried Helnwein, incluso la propia Sidney Sherman. ¿Por qué su reclamo a otras artes como la pintura y los grandes formatos?

— Creo, y lo digo objetivamente, que Andreas Gursky, que en este momento es el fotógrafo más “hot”, es en realidad el más aburrido del mundo. Fotografía el interior de supermercados, los campos de fútbol, etcétera; su proyecto es en verdad un informe anual de una empresa cualquiera, pero su sentido artístico es de una enormidad tangible, por lo menos de tres o cuatro metros cada pieza suya. Si las reduces a un tiraje de 24X30 centímetros, se podrían ver de otra manera, y se entendería mi postura. Por lo tanto, es una cuestión de medidas. Por otra parte, hoy en día  tienes que hacer fotografía en color para  después decir que no eres fotógrafo, sino “fotógrafo guión artista”. Porque si eres un simple fotógrafo, tu obra vale 5 mil dólares, pero si eres lo otro entonces vale 70 mil dólares cada foto. Todo es un absurdo, ¿no lo crees?

—¿Cree que en estos momentos hay un mercado  mayor de la fotografía?

—Desde luego. Ahora, los museos y las gentes quieren comprar foto; antes, ni pensarlo. En la galería de Janis, quien compraba fotografías quería comprar  las mías; en otras galerías, como Pace MacGill, el ir y venir es continuo. Claro, los dos tienen conceptos y clientes diferentes, pues, como te decía, Janis era más especialista en pintura, lo cual era para mí una desventaja. Cada una tenía su público y sus clientes especiales.

— En este sentido, ¿podríamos decir que la fotografía se ha vuelto más cara que la pintura?

— Quizás hoy la foto es el último arte económicamente accesible. Cindy Sherman vendió, hace un tiempo, una de esas fotos que son autorretratos por 260 mil dólares. Es algo ridículo e innecesario.

— En estos momentos se dice y se repite que el arte  vive una gran crisis y una pérdida de identidad. Ahora lo que importa es la fama, ¿hay crisis también en la fotografía?

— La crisis es general, los jóvenes no tienen idea del arte ni de su filosofía, lo que quieren saber es qué tienen que hacer para ser famosos. Pero, para mí, hay que saber explicar qué quieres decir con tu trabajo, y si la necesidad que tienes es grande, entonces encontrarás el modo de expresarte a través de una fotografía, una pintura o un poema. Lo que cuenta no es dar en el blanco, sino lo que haces para perfeccionar tu forma. Cuando lo entiendas entonces podrás darle al blanco; mientras, no lo creo.

— Pero también está el otro lado, los grandes artistas que dan en el blanco y nunca salen de lo mismo. Es decir, se repiten  hasta el cansancio, ¿esto lo considera un peligro?
 
Rigamarole, 2012; Tintype with oil paint Duane Michals—
 The William T. Hillman Fund for Photography, Carnegie  
Museum of Art, Pittsburgh/Courtesy of the Artist and DC Moore Gallery
— Es peligroso, sí, pero es lo que estamos viendo hoy en día. Hay muchos fotógrafos que han adquirido cierta fama, pero su trabajo es un producto blanco, sin mundo interior, que carece de pasión; ya es una máquina la que trabaja, no el artista. Y además si  tienes éxito, has de seguir produciendo una y otra vez. Pienso otra vez en Gursky o en Sherman, que hacen un discurso estético y no salen de él, porque es lo que les resulta gratificante en el mercado.




— ¿Quién se salva de su crítica feroz en la fotografía contemporánea?

— Creo que Salley Man es auténtica, me gusta. Aunque debo confesar que no veo mucha foto: paso gran parte de mi tiempo trabajando y me pierdo del mundo. En ocasiones, cuando salgo de mi mundo, he logrado encontrar cosas como el trabajo de Robert Parke Harrison, que en verdad es extraordinario. Descubrí un libro  suyo y está lleno de imaginación, las fotos son fantásticas. Ojalá pronto tenga la oportunidad de descubrir cosas nuevas.

— ¿Considera que el papel determinante que jugó la fotografía ha cambiado? O mejor dicho,, qué ha cambiado…



— Bueno lo que considerábamos que era la foto…Es decir, lo que hacía mi generación, no sólo en su discurso, sino también en la técnica, está acabado. El concepto de la fotografía se ha vuelto muy democrático, la más democrática de todas las artes porque todo el mundo puede hacerla. Es un decir, pero es cierto. Hoy con un teléfono puedes hacer foto, y no tienes que ser un profesional, sino un mero aficionado, y la puedes mejorar ya no en el estudio, sino en la computadora o en el mismo móvil la editas… Es brutal ver cómo las cosas han cambiado tanto...

Fuentes: Texto www.cronica.com.mx , fotografia 2 y 3 www.americanphotomag.com ,foto 1 www.albedomedia.com

jueves, 5 de octubre de 2017

LA CASA IMPOSIBLE DEL ARTISTA JAPONÉS KIYOTO OTAKIYOTO OTA


Kiyoto Ota presenta su último proyecto escultórico, con el que explora la relación entre el lugar y el espacio.

Por Roberto García Hernández
Octubre 3, 2017

Tres casas de madera rodean al visitante dentro del Museo Universitario del Chopo. Su factura impecable y aspecto tradicional evocan una pintoresca tranquilidad. Sin embargo, al asomarse a sus interiores se hace obvio que algo está mal. En la primera, la puerta atraviesa la casa sólo para llegar directamente a una salida; en la segunda, lo que parece desde adentro una puerta es, en realidad, una ventana; y en la tercera, sin ninguna explicación, está lloviendo en el interior.

“Nave Úteruz”, 2011.
Ensamble en madera de cedro blanco
 “Es una escultura, no es una casa”, asegura su creador, el artista Kiyoto Ota. Nacido en Sasebo, Nagasaki, en 1948, pero radicado en México desde 1972, ha desarrollado en su obra escultórica una profunda relación con la naturaleza, donde materiales como piedra, hierro colado o plomo conviven con elementos naturales. En sus piezas no es extraño encontrar estructuras tubulares con ventiladores por donde corre aire (Viento, 2011), o pesadas formas de metal cubiertas con escarcha generada por la refrigeración (Resonancia congelada, 1997). Para Ota, la materialidad de las estructuras se redimensiona al enfrentarlas con elementos vivos de la naturaleza.
No obstante, va más allá con su última serie, “Úteruz”, que comenzó en 2006. “Llegué a un cuestionamiento”, comenta el artista, “la escultura, de todos modos, es un arte táctil, para sentir y tocar. ‘Úteruz’ viene de útero, de mujer, un espacio donde puedes sentir tranquilidad. Quería empezar con ese tipo de escultura”. Las piezas de esta serie son estructuras de maderas como encino, pino y cedro blanco, con un espacio interior de forma esférica por donde se entra para experimentar el espacio sensorialmente, a fin de recuperar la memoria del útero materno. Pero esto era apenas el principio: “Después de varios años sentí que algo faltaba. Era la representación de un útero, la gente entraba y sentía tranquilidad, funcionaba. Pero la cuestión es que ‘Úteruz’ es como un lugar. ¿Cuál es la diferencia entre el lugar y el espacio? Eso es lo que quería aclarar.”

El resultado es la exposición “3 Casas Extraordinarias”, que podrá visitarse hasta el 3 de diciembre. Para este, su proyecto más ambicioso a la fecha, Ota construyó dentro de la Galería Sur del Museo Universitario del Chopo tres casas que no protegen ni acogen al visitante, que anulan su condición de refugio, una idea que Ota llama “contraúteruz”. El artista replanteó la relación entre lugar y espacio, un concepto desarrollado por el geógrafo chino-estadounidense Yi-Fu Tuan, quien escribe que “espacio” tiene un carácter abstracto, es abierto, libre y a la vez amenazante, pero al ir conociéndolo le asignamos un valor y poco a poco se convierte en “lugar”, que es seguro y nos brinda estabilidad. El ejemplo más claro es la casa. “Parecen casas, claro, porque puedes entrar, pero no tienen la funcionalidad de una casa, porque no puedes quedarte mucho tiempo, no puedes sentirte cómodo. Se trata de cómo transformas el lugar en otra cosa. Quitas la funcionalidad de la casa”, dice Ota, quien las construyó con el objetivo de hacerlas perder su significado, su condición de lugar.

La primera es Casa de viento (2014), compuesta por dos pasillos que se cruzan, por lo que carece de habitaciones. Un corredor conecta dos puertas y el otro dos ventanas en las que se han instalado ventiladores. La obra nació de una experiencia personal: al morir los padres de Ota hace una década en Japón, la heredó, pero se vio imposibilitado de cuidarla. “Quedó abandonada, me sentí mal. Casa en la que no vive nadie ya no es casa, porque se pudre y su sensación es fría, triste”, dice el artista, “como no puedo traer mi casa, hice algo simbólicamente, construida en madera, parecida a una casa tradicional de Japón.”

En Casa de lluvia (2016) un mecanismo de riego hace que llueva a cántaros en su interior. Es incapaz de funcionar como refugio. “Es totalmente una ironía.” No obstante, pese a lo inhóspito que resulta una casa que recibe a uno con un aguacero, se puede sentir la brisa fresca y el aroma a madera mojada que hace de esta obra una experiencia entrañable.

Casa de Alicia (2017) es la de aspecto más común y la más engañosa. En su interior una escalera conduce hacia una puerta lejana, pero al subir notamos que el pasillo se vuelve tan estrecho que ya no es posible seguir avanzando. Al examinar la casa por fuera se aprecia que aquella puerta inaccesible era una ventana trasera. Ota manipuló la perspectiva para crear la ilusión de profundidad. “Confiamos demasiado en lo visual, pero a veces hay trampas”, comenta.

Aunque físicamente estas casas ofrecen una hospitalidad limitada, el verdadero terreno en que son habitadas es más mental. Para el artista el reto no es transformar estas construcciones físicamente, sino en lo conceptual, volverlas otra cosa, y el propósito no es otro que la voluntad por transformar la identidad del espectador, afectarlo. “Yo pienso que la escultura es un recipiente de energía. Pienso que el escultor va a transformar el material y con eso transforma el espíritu de la gente. Creo que ése es el carácter de la escultura o del arte”, concluye Ota.
KIYOTO OTA
Articulo Tomado de Gato pardo 

VUELVE 'ARTBO FIN DE SEMANA

"RECUERDEN TODAS LAS ACTIVIDADES SON GRATUITAS Y ABIERTAS AL PÚBLICO CON UN HORARIO EXTENDIDO DURANTE LOS TRES DÍAS" Este 12, 13 y...