domingo, 16 de diciembre de 2018

ALFONSO BELEÑO

Foto: Tito Aillón
El pasado mes de octubre se llevó a cabo la semana del arte. Cinco días donde Bogotá  se convirtió en anfitriona del arte nacional e internacional al abrir  espacios a las diferentes  Ferias de Arte y eventos alternos entorno a ellas. El tiempo de visitas semana es difícil de manejar porque, la verdad, no alcanza para dar una vuelta a cabalidad y conciencia por cada foco generador de arte en la ciudad  y a causa de esto  quedan muchas cosas en el tintero.

En el caso mío el tiempo y los problemas de movilidad  me dieron solo para visitar  dos ferias (Artbo, Art Chico) y algunas galerías independientes. Dentro de  este recorrido en el 2018  conocí las propuestas de nuevos artistas; uno de ellos es Alfonso Beleño quien participó en Art Chico. Bogotano de nacimiento, con raíces en el departamento del Cesar, egresado de la facultad de arte de la universidad de los Andes en 2007.

Su acercamiento al arte comienza desde muy joven cuando  sus padres le vinculan a academias de arte donde comienza pintando. En su afán de conocer más de la técnica inicia una exploración empírica donde los libros de artistas como van Gogh y Goya, que su padre le compraba, así como su admiración por  Botero y Obregón lo sumergían más en la pintura. Por ello  decide ingresar a la universidad para desarrollar la técnica  y persistir en la pintura al óleo.

Desde su primera muestra en el 2001 en la galería La Cometa, Beleño ha expuesto en diferentes  espacios como el  salón de pintura joven, el club el Nogal en diferentes oportunidades; con la galería casa cuadrada trabajó varios años y con ellos asistió a Artbo,  y Art lima. Fue invitado a exponer a la galería El Museo, participó en el salón bidimensional de la fundación Gilberto álzate Avendaño y en el salón premio Fernando Botero entre otras, actualmente está trabajando con la galería Baobab .

Viaja a Europa debido a su participación en  el premio Laguna Art Prize en Venecia. Lo que lo llevó a recorrer varios museos lo cual le dio un acercamiento a muchas de las obras  que estudió y que solo las referenciaba en los libros. Esto fortaleció su amor y pasión  por la pintura.  A su regreso a Colombia comienza un nuevo trabajo en el cual incluye capsulas[1].  Trabajo que conocí el  pasado mes de octubre. El artista define su trabajo con las capsulas como una extensión de la pintura. Es un continuar pintando pero de una forma más técnica. 

Paciente 
Foto Tomada  de latinamericanart.com
“Mi trabajo asemeja la práctica de los mosaicos[2] e incluso del puntillismo[3] pero mi interés es el realismo;  en el realismo se da la variedad de tonalidades para llegar a la configuración de la imagen. Me he preocupado mucho porque la técnica hable por sí misma y sea incluida dentro del concepto de lo que se está hablando” dice el artista.

Del  trabajo con la capsulas  surgió  una serie  llamada pastilleros que a su vez nace de una experiencia de salud personal del artista. Beleño explica la técnica como una fusión entre lo que vives y lo que haces, y asevera que “como artistas a veces somos sensibles a todo. En la capsulas vi la posibilidad de configurar una imagen con muchas tonalidades; empecé a investigar sobre las capsulas; pero había colores limitados. Lo que hice fue comprar capsulas transparentes y pintarlas una a una. Fue así como construí la paleta de tonalidades para sí llegar a la configuración de la imagen”.

La primera obra con esta técnica fue un autorretrato que se llamó Paciente, el cual es la representación de la paciencia con la que se tuvo que armar para sobrellevar lo que le agobiaba. De la misma manera que refiere la paciencia que tiene que tener para armar capsula por capsula su propia vida, su obra y su identidad”.



[1] son pequeños contenedores o envases solubles generalmente fabricados a base de gelatina en cuyo interior se halla la dosis del fármaco que se administrará por vía oral.

[2] es una obra pictórica elaborada con pequeñas piezas de piedra, cerámica o vidrio de diversas formas y colores, llamadas teselas, unidas mediante yeso u otro aglomerante para formar composiciones decorativas geométricas, figurativas o abstractas.

[3] es una técnica artística que consiste en hacer una obra mediante el uso de diminutos puntos. Aparece por primera vez en 1884.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario